sábado, 28 de febrero de 2015

DESGOBIERNOS DE NDF, LUGO, FRANCO Y CARTES, Y SUS COMPLICIDADES (OMISIONES Y/O ACCIONES), EN LA NUNCA INICIADA LUCHA PARA DERROTAR A LOS NARCOTERRORISTAS DEL “EPP” (OPORTUNISTAMENTE ASÍ DENOMINADOS), Y DEVOLVER LA SEGURIDAD A LA CIUDADANÍA, EN EL MARCO DE LA CONSTITUCIÓN, TRATADOS INTERNACIONALES Y NUESTRO DERECHO POSITIVO, EN BUSCA DE REALIZAR LA JUSTICIA. REFLEXIONES DESDE UNA LECTURA DE SUN TZU EN EL PARAGUAY DEL PRESENTE (I)

Abajo: galería de impresentables desgobernantes ¿paraguayos? Últimos (Crèditos de fotos: Cartes y Franco, UH; y segunda línea: Lugo, izquierda: www.alparaguay.blogspot.com; y derecha, NDF: www.hoy.com.py).

En esta serie, que tendrá su final en una reflexión global, con pretensiones de “balance estratégico”, acerca de la nunca pensada estratégicamente (en lo político y militar), y menos ejecutada lucha contra el “Epp”, entre 2003 y 2015 (el presente), en primer lugar ofrecemos información básica acerca del estratega chino Sun Tzu, tomada de fuentes elementales en las redes, al alcance de quienes lo deseen. Por ejemplo: http://es.wikipedia.org/wiki/El_arte_de_la_guerra:
“ ‘El arte de la guerra’ (chino simplificado: 孙子兵法; chino tradicional: 孫子兵法; pinyin: sūnzǐ bīngfǎ, literalmente «Arte de la guerra de Sūn Zǐ») es un libro sobre tácticas y estrategias militares, escrito por Sun Tzu, un famoso estratega militar chino.
“El autor de ‘El arte de la guerra’ fue Sun Zi o Sun Wu, su nombre oficial. Los relatos tradicionales afirmaban que su descendiente, Sun Bin (孙膑/sūn bìn), también escribió un tratado sobre tácticas militares, titulado ‘El arte de la guerra de Sun Bin’ (孙膑兵法/ sūn bìn bīngfǎ).
“Tanto Sun Zi como Sun Bin son referidos como Sun Zi en los escritos chinos clásicos, y algunos historiadores creyeron que ambos eran la misma persona, sin embargo, gracias al descubrimiento de varios rollos de bambú desenterrados en 1972 en la Montaña del Gorrión de Plata (Yinqueshan), en la ciudad de Linyin, Shandong, se confirma que Sun Bin escribió su propio arte de la guerra.
“Se considera que el texto fue escrito hacia el último tercio del siglo IV a.C. Este texto se dio a conocer en Europa a finales del siglo XVIII. Su primera aparición fue la edición francesa de 1772 en París, del jesuita Jean Joseph-Marie Amiot, fue titulada Art Militaire des Chinois.
“Fue y sigue siendo estudiado por todos aquellos estrategas militares que han dirigido ejércitos, pero también ha servido de gran ayuda para todo aquel guerrero que ha emprendido el Camino.
“El arte de la guerra es uno de los libros más antiguos que se han escrito. Fue el primer intento conocido sobre lecciones de guerra. Sin embargo, es todavía frecuentemente utilizado en la actualidad debido a que sus enseñanzas pueden ser aplicadas en muchas otras áreas donde está involucrado el conflicto”. Enlace para interesados: http://es.wikipedia.org/wiki/El_arte_de_la_guerra, se repite.
Después de lo anterior, y haciendo a un lado la introducción histórica acerca del autor y de su época, recurrimos a enseñanzas del gran pensador y conductor estratégico de la guerra, de la antigüedad de la más que milenaria civilización china, que fuera Sun Tzu, en “El arte de la guerra”. Para ello recurrimos a una “Introducción y traducción al español realizadas por Antonio Rivas: http://www.gorinkai.com/textos/suntzu.htm, un estudioso (uno de miles) de la materia.
De cada uno de los siete capítulos de la obra, seleccionamos uno o varios párrafos, y después lo comentamos de manera muy breve en términos del desempeño de ¿nuestra? “fuerza pública” (militares y policías) frente a los narcoterroristas del “Epp”, pretendiendo evaluar al respecto el desempeño del derruido, corrupto, elefantiásico e inoperante aparato de Estado, con bajísimo grado de institucionalización, y de los sucesivos ¿comandantes en Jefe?, y de sus respectivas cadenas de mando, “constitucionalmente” ¿subordinadas? a tal ¿autoridad suprema?
CAP. I: ESTIMACIONES
“[…] El arte de la guerra se basa en el engaño. Por lo tanto, cuando es capaz de atacar, ha de aparentar incapacidad; cuando las tropas se mueven, aparentar inactividad. Si está cerca del enemigo, ha de hacerle creer que está lejos; si está lejos, aparentar que se está cerca. Poner cebos para atraer al enemigo. Golpear al enemigo cuando está desordenado. Prepararse contra él cuando está seguro en todas partes. Evitarle durante un tiempo cuando es más fuerte. Si tu oponente tiene un temperamento colérico, intenta irritarle. Si es arrogante, trata de fomentar su egotismo. Si las tropas enemigas se hallan bien preparadas tras una reorganización, intenta desordenarlas. Si están unidas, siembra la disensión entre sus filas. Ataca al enemigo cuando no está preparado, y aparece cuando no te espera. Estas son las claves de la victoria para el estratega […]” (http://www.gorinkai.com/textos/suntzu2.htm).

COMENTARIOSDEL EDITOR DE ESTA PÁGINA WEB
Ninguno de los “comandantes en Jefe” mencionados” y sus mandos operacionales nunca recurrió al “engaño” en los términos que plantea Sun Tzu.

Nunca se atacó en serio al núcleo duro del enemigo interno del pueblo y la República del Paraguay.
Jamás se aparentó incapacidad e inactividad: son comportamientos habituales en nuestra ¿fuerza pública? Jamás se le hizo creer al enemigo narcoterrorista lo que era necesario estratégicamente, porque el aparato represivo de lo que llamamos ¿estado? carece de un área profesional de inteligencia y nunca se elaboró una estrategia para abordar esta lucha, que por lo tanto nunca se dio desde los “poderes constitucionales” y sus órganos.
Tampoco se aprovechó ninguna coyuntura de “desorden” del enemigo, ni la ¿fuerza pública? se preparó en momentos de su fortaleza. Tampoco se explotó el cólera y la arrogancia (“egotismo”) de los narcoterroristas del “Epp” y menos se proyectaron maniobras de envergadura variable para desordenarles y trabar sus procesos organizativos.
Nunca se intentó sembrar la disensión en el enemigo interno del Paraguay. Tampoco se lo atacó de manera sorpresiva.
Sin conocer a Sun Tzu, muy probablemente, los narcoterroristas del “Epp”, de manera intuitiva y/o circunstancial, siempre aprovecharon para sus fines nefastos y nefandos, las debilidades de las “autoridades constitucionales” de esta seudo democracia, que incluso falsa como tal, es de muy baja calidad.
El ¿parlamento?, y los ¿partidos? politiqueros, políticos no existen desde hace tiempo, jamás se ocupan en serio de estos asuntos. De hecho carecen no solo de especialistas en la materia, sino incluso de asesores de comprobada capacidad. Igual ocurre con la prensa: se limita a narrar lo ocurrido, casi siempre a partir de fuentes ¿oficiales? No se pretende desmerecer el trabajo de los periodistas, pero más allá del interés profesional y de los riesgos que corren, carecen hasta del menor conocimiento acerca de cuestiones de estrategia y tácticas de lo que debiera haber sido una guerra de baja intensidad, pero (y siempre constitucionalmente) basada en los principios del arte de la guerra y en el conocimiento de sus leyes.
Enlaces informativos: http://es.wikipedia.org/wiki/El_arte_de_la_guerra http://www.gorinkai.com/textos/suntzu.htm http://www.gorinkai.com/textos/suntzu2.htm
Bibliografía de consulta, adicional:
SWAYER, Ralph D.: El arte de la estrategia. Técnicas no convencionales para el mundo de los negocios y la política. Sun Tzu y los grande clásicos de la estrategia china (traucido del chino al inglés con una introducción histórica y comentarios, por R. D. Sawyer, con la colaboración de Mei-Chün Sawyer. Versiòn española y prólogo de Mauricio Prelooker), Distal, Buenos Aires, 1999 de la versión castellanana, 190 p.

HANZHANG, Tao (general): El arte de la guerra de Sun Tzu. La interpretación china moderna, Distal, Buenos Aires, 1996, 118 p.

JLSG
Asunción, a domingo a 22 de febrero de 2015

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