Sí al subsidio/indemnización para conscriptos policiales y militares del golpe de 1989, muertos o lisiados y discapacitados (físicos y/o mentales) sin distinción de bandos, y para civiles en iguales condiciones y con daños materiales, todo debidamente comprobado, para evitar el oportunismo de quienes se beneficiaran politiqueramente como víctimas de la dictadura.
Sí, siempre y cuando la ley correspondiente incluya un artículo sobre el origen/financiamiento de tales fondos, los que deberán salir del:
[i] Financiamiento del estado para partidos y movimientos políticos y del subsidio electoral, verdaderos robos al pueblo, “legales” e ilegítimos, y lo que reste de los últimos procesos de votaciones, que se distribuya de manera escrupulosa y en justicia a instituciones que trabajan realmente para sectores carenciados y muy necesitados. Concluida la distribución, por ley del congreso promulgada por el ejecutivo, todo en tiempo récord, tales delicuenciales financiamiento y subsidios politiqueros y partidocráticos deberán desaparecer ;
[ii] Recorte sustancial y por ley de las jubilaciones de privilegio en los altos y medios cargos de la burocracia estatal, centralizada y no, empezando por la riquísima caja de los parlamentarios pos 1989, y con una quita mayor a quienes hayan pergeñado este acto “legislativo” de “reparación histórica”; y,
[iii] De la reducción total e inmediata, por ley del congreso, promulgada de manera debida, de los inmensos gastos suntuarios del aparato de Estado.
En otras palabras: ¡que politiqueros y burrocrateros partidocráticos, con y sin uniforme, que tanto se han beneficiado con el pos 3 de febrero, el del populismo neoautoritario disfrazado de democracia de muy baja calidad, devuelvan algo de lo que han expropiado a la nación, por medio de leyes nulas de nulidad absoluta, votadas y promulgadas por sus beneficiarios, en su inmensa mayoría corruptos, incapaces supinos e incompetentes para respresentarnos.
Enlace:
http://www.abc.com.py/nacionales/subsidio-por-golpe-de-estado-1327020.html
JLSG
Asunción, a 16 de enero de 2015
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