Escribe José Luis Simón G.
En la foto ilustración, en abrazo de cómplices, Fernando
Lugo, presidente castro-chavista, y Aldo (“Acero”, el Stalin local) Zucolillo,
su valedor, maquillador y asesor ante la SIP, y quien puso su periódico al
servicio de la candidatura del apóstata monseñor-candidato, sin lo cual tal
engendro politiquero no triunfaba en las votaciones, ya que no estrictamente
hablando elecciones. Igual hizo con Cartes. Se desembarazó de Lugo cuando
empezó a caer y hará lo mismo con Cartes, el lacayo de la “emperatriz” Dilma y
de La Habana de los genocida Castro y de la Cuba-Zuela de Maduro (foto archivo,
presumiblemente de abc).
Los
editoriales no deben ser titulados como pregunta, pues se presume que en ese
artículo habla oficialmente el medio para sentar claramente una postura sobre
un asunto de interés nacional o de la sociedad, y también regional y mundial,
aunque el propietario del medio, y por ello el director, en este caso sea un
analfabeto funcional, salvo en su muy exitosa experiencia de ganar centenares o
miles de millones de dólares en su vida.
Es
el único “valor” en la miserable existencia de un multimillonario, quien olvidó
muy pronto, si alguna vez le enseñaron en su colegio, el tradicional “San
José”, el de otras épocas, que cuando los humildes mortales morimos, no
llevamos nada con nosotros, excepto el bien que hemos sembrado, para la
comunidad y nuestros seres queridos que también nos alienta a ser mejores si
así procedemos.
El editorialista, pero
sobre todo el director-propietario de abc, el señor Aldo Zucolillo, deben
abandonar la demagogia de pretender ocultar su adicción nunca curada a todos
los oficialismos, desde el autoritarismo stroessnerista en adelante (1954-1989)
y cada vez más descarado, pues todo lo que hizo Horacio Cartes, después del 21
de abril, vehiculizado por sus entornos, es decir, él, no ha consistido sino en
la entrega sistemática, gradual y profundizada de la soberanía, la
independencia, la dignidad, la historia, la seguridad, la defensa y los
intereses nacionales permanentes y actuales.
En
materia de obsecuencia a los castro-chavistas, y no por gobernante patriota,
sino por su incompetencia extrema, el pésimo presidente castro-chavista que
fuera Fernando Lugo ha llegado a los grados de obsecuencia con el neo
totalitarismo regional, que el actual
mandatario, Horacio Cartes, que no lo es ni siquiera de los colorados, sino de
los “neo colorados carteristas”, siempre y cuando no se contradigan sus
intereses de tripa gorda con las órdenes de La Habana, Brasilia, Caracas,
Buenos, Aires, Quito, Paramaribo, La Paz, Managua…
Incluso
le ayudaron a Cartes, no solo abc, todos los “grandes” medios, con la inmensa
cortina de humo, la de destapar oportunamente la corrupción (una parte de ella,
la vinculada al nepotismo y al patrimonialismo) en lo que debiera ser un
respetadísimo Congreso de la Nación paraguaya, que no lo es desde hace
muchísimo tiempo, y en cambio gran parte hoy sus integrantes no son sino
marionetas del “carterismo” coyuntural, pero de males que perdurarán décadas en
la realidad nacional, si no enfrentamos este desafío con la Constitución en las
manos, en el cerebro, en el corazón.
¡Qué casualidad! El
“destape” del nepotismo “parlamentario” (¿es el único?) ocurrió cuando Cartes,
desde su aventura unasuriana en Paramaribo (¿es su jefe en negocios el
“presidente” castro-chavista de Surinam, Desiré “Dési” Delano Bouterse convertido en jefe del
crimen internacional organizado en esa región: le acusan de lavador de dinero, de intermediario de las FARC en armas, transporte
y venta de cocaína, y salidas y entradas ilegales de criminales en serie?) y
primer besamanos (por orden de la “emperatriz” petista Dilma) con el dictadorzuelo
Nicolás Maduro, golpista fracasado en el Paraguay, y siguiendo el libreto y los tiempos de la
entrega total de la violada soberanía y dignidad del Paraguay, preparado por
los patoteros neo totalitarios de la región, los del “socialismo siglo XXI”.
¿Por
qué abc y los “grandes” medios jamás publicaron investigaciones acerca de los
orígenes de la inmensa fortuna de Cartes? Mientras este no había salido aún al
chiquero politiquero local con su aventurerista “candidatura” presidencial, a
la que se vendieran los colorados de hoy, las páginas de abc llegaron a
publicar incluso los informes oficiales norteamericanos acerca de
investigaciones sobre Cartes y su supuesta implicancia el lavado de dinero en
gran escala, incluso internacionalmente hablando, publicados por el escándalo
de “Wikileaks”. Pero desde su ascenso meteórico en la politiquería nacional,
salvo excepciones individuales firmadas de abc, nada más volvió a aparecer en sobre
Cartes y su pasado, en las páginas ¿censurada$$$$$$$$$$$$$$? por Zucolillo.
¡Casi
nada más! abc incluso ocultó (o minimizó
en grado extremo) investigaciones al respecto realizadas por un grupo hemisférico
de periodistas, del que formó parte ni más ni menos que una de sus editoras,
Mabel Rehnfeldt, que fue también $ilenciada por todas las cadenas mediáticas y
grandes medios, los vinculados a CERNECO y a las grandes organizaciones
“empresariales” del país. Entre paréntesis: ¿realmente son corporaciones
empresariales o solo grupos de presión fácticos?
El blog de esta página
publicó todos esos antecedentes y recibió una gran afluencia de visitas, pero
un blog, el mío al menos, no tiene todavía la fuerza de la que hace ostentación
abc, que utiliza tal hecho, su importancia como prensa “poder fáctico”, en un
mercado que mueve miles de millones de dólares al año, en cuestiones de
publicidad, politiqueras y no.
Parafraseando
a un monarca europeo constitucional muy respetado por respetable, a pesar de
sus humanas debilidades, y cuando todos los “demócratas” de la región se
prosternaban ante Chávez-Castro y sus locuras,
en una de las últimas cumbres iberoamericanas (están en camino de
extinción por las inconsecuencias de los socialistoides y conservadores desgobiernos
españoles), con tono bien popular Don Juan Carlos le gritó al caraqueño: ¡por
qué no te callas! Lo mismo se lo digo a Ud., señor Zucolillo. Aunque ya sabemos
que los “dueños” de las libertades de pensamiento y expresión, como Ud., Rubín,
Vierci, los Domínguez y Biedermann, Cerneco, el de la RPC, y demás, y sus
escribidores y perifoneadores de turno, “blogueros”, también, apenas Cartes
empiece a desmoronarse, se convertirán en sus más destacados verdugos.
Y a pesar de estas
bellaquerías de quienes como Ud., se creen los-amos-del-universo, desde la
“prensa canalla”, no estoy de acuerdo con la oportunista, ladrona y dictatorial
CFK y su ley de medios audiovisuales, pues para enfrentar al oligopolio del
Grupo Clarín, desde que se volvió “opositor”, lo quiere hacer mediante el
monopolio de la prensa por su régimen. Lo preocupante no es eso, que ella en
ello está en su papel. Lo que es grave es la gran aceptación que tuvo en
amplios sectores de la ciudadanía esa postura, generada por el abuso sin
límites de la “prensa canalla”, y que incluso cosechó desubicados votos de
parlamentarios “opositores”, supuestamente “democráticos”, y contó con el
servil fallo de la Cortesanía Suprema de la Injusticia en argentina, en lo
fundamental por una diferencia de apenas un voto: ¡felicitaciones a los tres
ciudadanos jueces supremos, quienes votaron por no agravar con la oficialización
total de la prensa, las reacciones negativas que generan poderes fácticos como
Clarín y la prensa oficialista, allá, y
aquí abc, que es mínimo en comparación con ese monstruo, que encabeza Ernestina
Herrera de Noble, pero que tiene a su comandante en Jefe en el incombustible
Héctor Magneto.
No
todo fue malo en nuestra constitución (¡con “fe de erratas”!) de 1992: en su
parte dogmática introdujo normas basada en la mejor doctrina de las sociedades
abiertas y el Estado de derecho democrático, según las cuales no existen
delitos de prensa, sino cometidos utilizando a los medio periodísticos, lo que
lógicamente debe ser judicializado y reparado en justicia, pero siguiendo
también la doctrina norteamericana de la “real malicia”, que pone garantías
adicionales para fortalecer las libertades de pensamiento y de su expresión,
limitando sus abusos periodísticos y poniendo vallas a quienes pretenden
“judicializar” todo lo que a prensa se refiere para ejercer impunemente la
censura.
Zucolillo,
que ni siquiera es el “ciudadano Kane”, y mucho menos está a la altura de un
verdadero prócer de la democracia continental, como fuera Pedro Joaquín
Chamorro Cardenal, empresario honrado y honrado dueño y verdadero director de
la valiente en extremo “La Prensa” de Managua, y quien fuera asesinado por los
sicarios de la dinastía criminal de los Somoza.
Zucolillo, y sin
desearle mal alguno, de Chamorro Cardenal Ud. debiera ser al menos un desvaído
discípulo cívico, empresarial y periodístico. Pero es muchísimo pedir: el era
Pedro Joaquín Chamorro Cardenal, combatiente democrático, incluso con las armas
para enfrentar a los monstruos Somoza, protegidos entonces por la
norteamericana “república imperial” (Aron, “dixit”), en la época de la guerra
fría, y Ud. apenas es Zucolillo, el dueño de una inmensa fortuna, y quien jamás
hizo su autocrítica por los lustros de respaldo a la dictadura de Stroessner,
quien ordenó al final la totalitaria clausura de abc, cuando se sumó a la
prensa crítica que ya existía. Incluyo por ejemplo, entre los reprimidos y
siempre olvidados, al abogado, profesor universitario y periodista libre, de
filiavión política y colorada, que fuera Víctor J. Simón B. (tiempo ha ya
fallecido, como su hermano mayor, mi padre), a quien Stroessner jamás logró
comprar ni atemorizar y por eso censuró su programa “Radio Periódico del
Pueblo”, que denunciaba las atrocidades del dictador y de su partido en función
de comparsa gubernamental.
Eso le costó a “tío Peti”, así le llamábamos en
familia y lo hacían también sus amigos, casi un año de confinamiento en Fortín
Lóbrego (Ingavi), donde su desolación e iniquidades y torturas parecidas, y el
aislamiento total, casi lo matan, y si no murió fue porque humildes conscriptos
y jóvenes jefes de nuestras FFAA, desobedeciendo al dictador le cedían incluso la
pequeña ración de comida (fariña, galleta, carne de depredadores de los montes,
agua de un pequeño tajamar y leche de cabra, que de por sí les era insuficiente
incluso para la sobrevivencia de ellos. Humberto Rubín, otro “poderoso” local
como Ud., que es el auto inventado dueño de los micrófonos “libertarios”, ni
siquiera conoce esta historia de dignidad humana, coraje cívico y valor
periodístico, pues él en esos tiempos (fines de los años de las décadas de los
cincuenta e inicios de los del sesenta) todavía lucraba con la dictadura y no
con las libertades de pensamiento y expresión, su gran negocio desde fines de
la dictadura, que todavía le dura.
JLSG
Asunción, a sábado 9 de noviembre de 2013
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