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| Imagen de El País |
Recién en 2005 “[…] el entonces arzobispo de Buenos Aires y actual papa Francisco, Jorge Bergoglio, encabezó una misa de reivindicación de Angelelli en la que lo llamó ‘mártir’. Era la primera vez que la jerarquía de la Iglesia lo calificaba así, aunque algunos pocos obispos, sacerdotes, religiosos y laicos llevaban décadas teniéndolo como referencia del compromiso con ‘quienes padecen hambre, miseria o injusticia en su vida’, según decía el prelado asesinado a sus 53 años […]”.
En 1976 medios de la gran prensa internacional, y si mal no recuerdo, entre ellos el muy valiente periódico porteño “Buenos Aires Herald”, informaban que el obispo Angelelli había sido otra víctima mortal del terrorismo de Estado, por medio del cual los golpistas militares argentinos de entonces creyeron que iban a derrotar a los terroristas “revolucionarios” por medio de la “guerra sucia”.
En esa época, el entonces monseñor Bergoglio, y sus colegas del episcopado argentino callaron el crimen. En 2005, siendo ya arzobispo de Buenos Aires, Bergoglio inició la reivindicación “cristiana” de Angelelli, uno de los obispos “tercermundistas” de la Argentina del doble terrorismo, el “revolucionario” y el del Estado. ¿Data de esa época el acercamiento del papa Francisco a los “teólogos de la liberación”, en realidad teóricos de la revolución totalitaria marxista, aunque sus más prominentes pensadores sigan negando esto último?
Si el papa Francisco, oportunistamente ahora se hace el “tercermundista” y el de la “liberación”, lo sabremos muy pronto aquí, cuando los enviados del Vaticano para investigar el escándalo Livieres-Cuquejo, más parecerían inquisidores de los siglos de “caza de brujas” en lo más negro del cristianismo romano, pues vienen solo a “investigar” a Livieres. De hecho es llamativo que los “católicos revolucionarios” locales, incluido Lugo, ya celebraron anticipadamente esta misión como una de condena a Livieres… Lo peor que le puede ocurrir al cristianismo católico es que para que el mundo olvide sus “pecados” reaccionarios, ahora se vuelva “cristianismo católico revolucionario”.
Si es así el papa Francisco está empezando a quitarse la careta y en el catolicismo romano aflorará el cisma –nunca reconocido oficialmente por el Vaticano– que lo divide desde hace mucho tiempo, y que hasta ahora no se manifestaba en el exterior, pues era una lucha intestina aunque a voces y gritos.
En Argentina, la nueva condena a los militares acusados de haber ordenado el asesinato de monseñor Angelelli, tan genocidas como Fidel Castro, está siendo celebrada con odio y sentimientos de venganza por organizaciones de “DDHH” y “teólogos de la liberación”, todos financiados por la castrochavista CFK. Son los mismos que callaron el asesinato del disidente cubano, de orientación socialcristiana, Oswaldo Payá, perpetrado por la KGB castrista, poco más de un año atrás, que también (si no recuerdo mal) costara la vida a un ciudadano español, y por el mismo procedimiento empleado décadas atrás para eliminar por medios terroristas a un obispo “comprometido con los pobres”: un supuesto accidente entre coches en marcha…
Enlace para leer la noticia completa desde El País
http://internacional.elpais.com/internacional/2014/07/04/actualidad/1404505713_083771.html
JLSG
Asunción, a viernes 4 de julio de 2014
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