El pabellón nacional se eleva a los cielos de la tierra y atrás el Templo de la Patria, el Panteón Nacional de los Héroes y Oratorio de la Virgen Santa María de la Asunción, que nos acogen a todos, creyentes y no creyentes, nacionales y gentes de otras tierras. ¡Este Templo-Oratorio representa soberanía entre iguales, Estado de derecho democrático y sociedad abierta, que permiten construir a diario, paso a paso, con justicia y libertad, la condición humana!

martes, 29 de enero de 2013

La República del Paraguay debe recurrir de inmediato a la Corte Internacional de Justicia de La Haya, en busca de protección jurídica y de reparaciones, por las agresiones recibidas, a partir del juicio político de junio pasado, que no cesan y se agravan, con la complicidad de los “castro-bolivarianos” locales, la incompetencia y cobardía extrema en materia de seguridad y defensa de la Patria por parte del Palacio de López y por la ceguera partidocrática de los actuales líderes politiqueros



La majestuosa sede de la Corte Internacional de Justicia de La Haya (Países Bajos), la más importante instancia del Derecho Internacional a la que el Paraguay debe acudir de inmediato en busca de justicia. La otra dimensión es la estratégica y político-diplomática, que
debe acompañar a esas acciones con una nueva política de alianzas con Estados Unidos y el

Acuerdo del Asia-Pacífico, con Canadá, México y países centroamericanos, y con Inglaterra,

Francia y otras potencias mundiales, y sin olvidar a Israel (Fuente: Wikimedia Commons).




El Paraguay ya no puede esperar más. Este desgobierno, sino quiere pasar a la historia como el más entreguista de todo el bicentenario, a inicios del tercero, sin pérdida de tiempo, que ya no lo tenemos, debe de inmediato iniciar las acciones de “ius standi” a que tiene pleno y absoluto derecho en el ámbito de la Corte Internacional de Justicia de La Haya. La seguridad y defensa de la República del Paraguay no deben limitarse a lo jurídico internacional, pues también requieren de políticas públicas externas decididas, que garanticen nuestras soberanía, independencia e integridad territorial, bien pensadas y mejor ejecutadas y que nos brinden las ventajas de las alianzas estratégicas de beneficio mutuo, con antiguos amigos y nuevos también. Acerca de estas dimensiones de la realidad nacional, habremos de dedicarles varios artículos, desde este blog y desde la web y páginas de “facebook”, las del autor y las de “Defensa Nacional”.

En el campo jurídio-diplomático acaban de hablar nuevamente, y con la solvencia que les caracteriza, como com-Patriotas y profesionales de la diplomacia y el derecho internacional, los ex cancilleres José A. Moreno Rufinelli y Luis María Ramírez Boettner, ambos embajadores no activos de nuestro tan desorientado servicio exterior, que desde el “lugo-bolivarianismo” carece del menor norte de orientación favorable al interés nacional paraguayo.

Entrevistado por “abc”, dijo Moreno Rufinelli: “[…] la única defensa que Paraguay tiene es recurrir a los estrados internacionales para que los principios estén a salvo, y Paraguay pueda salir airoso en cuanto a la primacía del derecho. Paraguay debe recurrir a los estrados internacionales de justicia. Es evidente que acá en la región no vamos a encontrar justicia […] el problema que tropieza Paraguay es que Brasil y la Argentina no reconocen la jurisdicción de La Haya [...] porque saben que si van a La Haya perderán, porque ellos han violado expresamente los tratados internacionales del Mercosur. Es una cuestión de principios que Paraguay debe sostener porque en todo momento fue injusta, arbitraria, ilegalmente sancionado […]”, y reiteró que la supuesta Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) carece de futuro.

Es cierto esto. La CELAC es la apuesta totalitaria por el pasado. Y con respecto a ir a La Haya, total acuerdo. Y aunque es cierto lo que sostiene el ex canciller, acerca de que Argentina, Brasil y los demás países no aceptará la jurisdicción de La Haya, más abajo iniciamos la explicación de por qué eso no es trascendente ahora. ¡Igual podemos empezar las acciones precautelando el futuro de nuestros descendientes y en el marco del Derecho Internacional. Contribuiremos así a la encontrar soluciones pacíficas para un grave problema regional, en una coyuntura en que la Humanidad está sometida a numerosas situaciones y amenazas bélicas y de terrorismo. Aparte de otras cuestiones.

Y hablando para el periodista Hugo Ruíz Olazar, también de “abc”, el embajador Ramírez Boettner volvió a expresar su postura, con la energía, la argumentación apropiada y el espíritu patriótico que le caracterizan. Dijo: “[…] El Gobierno debe denunciar ante el Tribunal de La Haya la violación por Argentina, Brasil y Uruguay del Tratado de Mercosur […]”. Reiteró sus críticas al tan pobre protagonismo diplomático actual de nuestro país. “[…] Ir a La Haya es algo fundamental para el Paraguay”, insistió, y agregó: “[…] Es vergonzoso cómo nos están tratando”. No dudó en sugerir que busquemos una alianza con Estados Unidos.

De la Sociedad de Naciones a la ONU
¡Sin  un segundo más que perder, la consigna es ir a La Haya por las razones acabadas de leer y las que se exponen a continuación! La Carta de la ONU (San Francisco, EUA, 1945), en sus capítulos VI y XIV creó como un órgano principal de las Naciones Unidas el Tribunal Internacional de Justicia (TIJ: ver arts. 7 y 92-96), sucesor del ya desaparecido Tribunal Permanente de de Justicia Internacional (TPJI), originado en el Pacto de la Sociedad de Naciones (SdN: Tratado de Versalles, París, 1919). La disolución de la SdN fue adoptada por su última Asamblea, el 18 de abril de 1946.

La sede oficial de la Corte Internacional de Justicia, como también se conoce al TIJ, es el Palacio de Paz de La Haya, aunque le está permitido reunirse en otro lugar, si lo estiman conveniente o necesario sus autoridades (Estatuto de la Corte o del TIJ, adoptado en 1945, Capítulo I: “Organización”, art. 22). Hasta el momento nunca ha ocurrido algo semejante.

Aunque ambas instituciones son órganos jurisdiccionales “internacionales”, y cualitativamente exhiben numerosas diferencias, entre ambas existen no pocas continuidades y significativas vinculaciones. La misma Carta (art. 92) de la ONU dejó establecido que el Estatuto del TIJ reconoce que el TPJI es una de sus fuentes y antecedentes jurídicos fundamentales. Amén de ello el Estatuto explícitamente menciona (Capítulo II, “Competencias de la Corte”: parágrafo 5, art. 36, y art. 37) que “supuestos de competencia aceptados por los Estados respecto” al TPJI han sido transferidos al contemporáneo Tribunal Internacional de Justicia. Su Estatuto se considera un tratado inserto en la Carta y establece que la Corte/Tribunal  es “un auténtico órgano judicial de solución de controversias judiciales”.

Para este breve trabajo lo concerniente a la organización general del instituto jurisdiccional internacional y a su procedimiento, no resultan asuntos de gran trascendencia ahora. Sí lo son en cambio, y fundamentales, las del “Ius standi”, de la Competencia y de la Función Consultiva. Esta última dimensión de nuestro objeto de estudio, al igual que lo relacionado con la sentencia de la Corte o Tribunal Internacional, y una evaluación general de este genuino recurso del Derecho Internacional, que estamos desperdiciando con rasgos de desgobierno, es decir, de mal cumplimiento de las funciones constitucionales por el Palacio de López, e importantes sectores politiqueros de todos los grupos, permiten pensar incluso en Traición a la Patria y a la Humanidad. Estas cuestiones serán tratadas en otras entregas.

Los Estados, partes de pleno derecho
Únicamente los Estados pueden accionar jurisdiccionalmente ante los estrados de la Corte. El “ius standi”, entonces, no es una facultad reglada de particulares y tampoco de las organizaciones internacionales, gubernamentales y no gubernamentales. El Paraguay califica perfectamente para hacer uso del “ius standi”.

A los mencionados actores internacionales, en especial a los gubernamentales, el Tribunal puede recurrir como medios auxiliares para obtener información acerca de los casos que tramita después de haber sido aceptados. Amén de ello, se les reconoce a las organizaciones internacionales la posibilidad de realizar trámites consultivos ante el TIJ.

El art. 35 del Estatuto de la Corte prescribe que el “ius standi” es prerrogativa automática de todos los Estados partes en él, e incluso de los miembros de la ONU (Carta: art. 93). Pero también un Estado no miembro de las Naciones Unidas puede ser considerado parte de un litigio ante el TIJ, tratándose cada caso en la Asamblea, siempre y cuando lo recomiende el Consejo de Seguridad.

Igualmente se contempla que un Estado no parte de los Estatutos (párrafo 2, art. 35) tiene legitimidad activa para recurrir a la Corte, por decisión del Consejo de Seguridad, en el marco del Derecho Internacional de los tratados, sin que ello signifique la menor “capitis deminutio” para tal Estado que enfrentará a otro con el pleno derecho a presentarse.

Cuestiones de competencia
El TIJ resuelve los litigios que han sido admitidos siguiendo la doctrina, principios, normas y jurisprudencia del Derecho Internacional en lo que a solución pacífica de controversias se refiere. En primer lugar debe mencionarse la cuestión de la libertad de la elección, según la cual la solución jurisdiccional requiere del consentimiento libre y soberano de los Estados partes.

“[…] Claro que tal procedimiento, como es lógico, puede manifestarse –sostiene el eminente profesor e internacionalista español, de reputación mundial, José A. Pastor Riudrejo– por diversas vías: bien ‘a posteriori’, es decir, después de surgida la controversia, y a través de un acuerdo especial que se llama compromiso; bien ‘a priori’, esto es, antes de nacida la controversia, en cuyo caso el consentimiento puede presentarse sea por vía convencional, sea por vía unilateral si concurre una declaración unilateral del otro Estado parte. El fundamento de la competencia es, pues, consensual, aunque el tribunal ha mitigado el rigor del principio atribuyéndose con base en el Estatuto o yendo más allá de su letra, una amplia competencia incidental […]” /1/.

“[…] Al supuesto del consentimiento prestado ‘a priori’ mediante un elemento convencional alude la segunda oración del párrafo 1 del artículo 36 del Estatuto cuando declara que ‘la competencia de la Corte se extiende a todos los litigios […] especialmente previstos en la Carta de la ONU o en los tratados y convenciones vigentes’. El tratado en cuestión puede ser un instrumento general de solución de controversias o bien un tratado referido a otra materia –por ejemplo, una convención codificadora–. En todo caso, según el artículo 37, ‘cuando un tratado o convención vigente disponga que un asunto sea sometido a una jurisdicción que debía instituir la Sociedad de Naciones, o la Corte Permanente de Justicia Internacional de Justicia’ […]” /2/.

Pero lo más importante para la República del Paraguay, en estos momentos tan críticos, es la síntesis normativa, doctrinaria, jurisprudencial y de principios que al respecto de un caso como el nuestro el profesor Pastor Riudrejo –quien en esto resume sabiamente el consenso existente entre los más destacados internacionalistas, desde la aparición de la Sociedad de Naciones, y después los avances avances en la materia en el sistema de la ONU– explica de la siguiente manera:

“[…] En fin, el párrafo 2 del artículo 36 contempla el supuesto de competencia resultante del juego de las declaraciones unilaterales de los Estados partes de la controversia […]. Efectivamente, los Estados partes en el Estatuto pueden declarar en cualquier momento que reconocen como obligatoria ‘ipso facto’ y sin convenio especial, respecto a cualquier otro Estado que acepte la misma obligación, la jurisdicción del Tribunal en todas las controversias de orden jurídico que versen sobre: a) la interpretación de un tratado; b) cualquier cuestión de Derecho Internacional; c) la existencia de todo hecho que, si fuere establecido, constituiría violación de una obligación internacional; d) la naturaleza o extensión  de la reparación que ha de hacerse por el quebrantamiento de una obligación internacional. La declaración puede hacerse incondicionalmente o bajo condición de reciprocidad por parte de varios  o determinados Estados o por tiempo determinado […]” /3/.

Este último párrafo, especialmente, y sin dejar de lado todo lo anterior, pone en manifiesto que no solo es justa sino plenamente pertinente en el Derecho Internacional, y en su doctrina, jurisprudencia y principios, la pretensión de importantes sectores de la sociedad paraguaya, en el sentido de acudir a la Corte de La Haya. Para enfrentar a la conspiración antiparaguaya y totalitaria del “castro-bolivarianismo”, y de sus mercenarios y aliados locales (esto último por comisión u omisión).

Tal decisión de inmediato debe adoptar este desgobierno, pos desgobierno del “lugo-bolivarianismo”, si no quiere incurrir en alta traición a la Patria, y en manifiesta,  irresponsable y dolosa desatención de los deberes-derechos del Poder Ejecutivo. Y en esta tan grave presunción, también incluimos a los líderes de los partidos políticos que se dicen democráticos, y que en plena campaña electoral están dejando de lado la gravísima cuestión del cerco totalitario que se va estrechando sobre el Paraguay,

Esto exige también medidas de seguridad y defensa de la República y de la nación, que demandará políticas públicas externas renovadas, activas, apropiadas para la presente coyuntura internacional, y con visión de futuro, lo que implica, entre otras muchas cuestiones, la elaboración de una política de alianzas estratégicas internacionales que sea efectiva para neutralizar los peligros que todavía hoy corre el Paraguay.

Hacia la reparación y las “fallas” externas
En esta breve nota, el autor considera que nada en lo fundamental le separa de las concepciones de dos ex cancilleres de la República, los embajadores  Ramírez Boettner y Moreno Rufinelli, y, que, muy por el contrario, este resumen apuntala jurídica e internacionalmente, y política y diplomáticamente, la importancia tremenda de iniciar acciones ante la Corte de La Haya, sin más pérdida de tiempo, que ya demasiado hemos dilapidado en actos de incoherencia, cobardía, irresponsabilidad, de parte de la Cancillería y del Palacio de López. Y también lo mismo puede decirse de quienes hoy se denominan líderes políticos (apenas politiqueros, para nosotros) del Paraguay del inmediato pos “lugo-bolivarianismo”.

La Patria paraguaya se encuentra en una situación de emergencia internacional de extrema gravedad, como no la vivimos desde la Guerra Grande (1864-1870) y desde la Epopeya del Chaco (1932-1935). Hoy más que nunca la Patria paraguaya exige imperiosamente un gobierno de patriótica unidad nacional, sobrio, eficiente, honesto y capaz, sin exclusiones, y cualquiera vaya a ser el resultado del proceso electoralista  de abril próximo, la administración gubernamental que resulte elegida, si no aspira a ser otro desgobierno, deberá gobernar con criterio nacional y no partidocrático.

¡El Paraguay debe defenderse de las sistemáticas agresiones de una coyuntura regional muy adversa, que incluso puede llegar a poner en peligro a la Humanidad, desde los puntos de quiebra que hoy son Cuba, Venezuela y los países “castro-bolivarianos” en general!

Es incluso extremadamente sospechoso el reciente “acuerdo” Buenos Aires-Teherán para investigar y solucionar bilateralmente los atentados contra la Amia e intereses del Estado de Israel en Buenos Aires, poco más de tres lustros atrás. Esto hace que la sombra del Irán de los fundamentalistas y terroristas se proyecte sobre la crisis del “castro-bolivarianismo” regional. Y en momentos en que todo el norte occidental de Africa (con epicentro en Mali) esté en plena efusión de violencia bélica, desatada por la proliferación de ramas de Al Qaeda en esa estratégica región del mundo.

Todo ocurre cuando la crisis de Siria se acerca a un desenlace que puede ser catastrófico para la alianza de iraníes y palestinos, en momento de gran inestabilidad en La Habana y Caracas, y con una Casa Rosada cada vez más tentada de volver a jugarse la carta “conflicto externo”, que si tiene nubes tormentosas sobre Paraguay, tampoco debemos olvidar la posible locura de otra aventura sangrienta malvinense. También las dos principales potencias mundiales, los EUA, democráticamente, y la China continental, bajo la conducción de un “Partido Comunista” que lleva adelante una política económica de capitalismo salvaje de Estado, acaban de renovar sus gobiernos, y ambos se guían (cada uno a su manera) por la ética de la responsabilidad.

En tan complejo ajedrez internacional, lo primero es saber quienes son amigos y quienes enemigos. Los enemigos ya se definieron. Nos toca responderles, desde el derecho internacional, La Haya, y desde las políticas públicas externas y estratégicas de seguridad, haciendo una opción decida con quienes han sido nuestros amigos y en el desconcierto de estos tiempos nublados los alejamos de nosotros y encontrar a los nuevos teniendo en cuenta la conjunción de nuestros intereses nacionales con los de tales actores internacionales de primer orden. Equivocarnos será fatal para nosotros, inevitablemente.




JLSG

Asunción, a martes 29 de enero de 2013

Código del artículo: LHRP


Enlaces y referencias
/1/ /2/ y /3/: José A. Pastor Riudrejo, “Curso de derecho internacional público y organizaciones internacionales”, Tecnos, 1996, Madrid, sexta edición.
http://www.abc.com.py/edicion-impresa/politica/la-unica-defensa-es-recurrir-a-los-estrados-internacionales-afirman-532582.html
http://www.abc.com.py/edicion-impresa/politica/excanciller-reitera-que-el-paraguay-debe-ir-a-la-haya-532279.html

domingo, 27 de enero de 2013

Amigas y amigos del Paraguay, residentes aquí o en el mundo, y a nuestros también compatriotas de la Humanidad, sin distinciones, en este cada vez más pequeño mundo, ya sin fronteras, y a la vez más ajeno, pero que lo recuperaremos para todos: ¡¡esta noche, a partir de las 21:00 hs. locales, y si la ANDE no mete la cola de su proverbial “eficiencia”, habrá Tertulia Ciudadana, en Radio GRC Musical, y les esperamos en nuestra finísima sintonía de cristal, envidiada hasta por los franceses de la Baccarat!! Estamos en http://www.desdeparaguay.com/grc


En nombre y legal y legítima representación de los tertulianos dominicales: José Luis Simón G.




Felisberto Hernández (1902-1964), el joven adulto “montevideano”, en la plenitud de su vida, excepcional pianista, compositor de renombre internacional, incomparable escritor (hermanado en la
literatura fantástica con el argentino Macedonio Fernández), y uno de los grandes artistas uruguayos universales (Fuente: http://www.elortiba.org/feliher.html, y sitio de la radio http://www.desdeparaguay.com/grc).



Desde nuestros estudios ubicados en el “penthouse” de la imponentísima torre de las Intergalácticas Emisoras GRC de 150 pisos, que es un extraordinario cono invertido, que desafía a la ley de la gravedad (¡estamos en el Paraguay, politiquero, todavía!), y lo hace desde la realidad de la más bella y pura imaginación, la que brota del corazón de la amistad, seremos sus anfitriones de esta noche Sergio Elena, Carlos y Roberto Crichigno, José A. Valenzuela F., y quien esto comparte con Uds., el ciudadano-soldado paraguayo y de la Humanidad, JLSG!

Desenmascararemos a los farsantes regionales y europeos de la CELAC (“Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños”), que el totalitarismo castro-“bolivariano” impuso a América latina y el Caribe, con la complicidad de los politiquerillos de Brasilia, Buenos aires, La Paz, Quito, Montevideo, Managua… Y, con lo peor de todo, la traición de Bogotá, Santiago, Lima y otras capitales, e incluyendo al cada vez mas ubicuo y omnívoro José Miguel Insulza, el secretario general de la ¿OEA?, que está haciendo la peor politiquería desde el sistema interamericano, para apoyar su precandidatura presidencial en Chile, respaldado por los petrodólares “bolivarianos” y la bendición de los Castro, “demócratas y defensores de los DDHH” desde hace poco más de medio siglo.

¡Todo en medio del silencio de la mayoría de los insustentables candidatos presidenciales paraguayos, a ninguno de los cuales escuchamos hablar en serio al respecto, desde la perspectiva de la seguridad y defensa de la República del Paraguay, en el tan prostituido ambiente regional e internacional del presente. Algunos, muy pocos, entre la abrumadora mayoría que son los líderes politiqueros paraguayos, se suelen referir a toda esta indignidad, que acaba de tener su apoteosis de la muerte del ideal democrático en el área, en la CELAC-Santiago, si es que alguien ha dicho algo en verdad importante, desde el punto de vista del interés nacional paraguayo y de la Humanidad. ¡Ese Chile tan querido de la tradición y culturas cívica y democrática, con su presidente Sebastián Piñera, ¡derechista y genuflexo ante Fidel Castro!, a la cabeza, convirtió a Santiago en el sepulturero de la democracia y los DDHH en las Américas!

Todo esta parte de nuestra tertulia, durará, a lo sumo 45 minutos, y entre gritos y gritos de alegría por los goles paraguayos de esta noche, de inmediato pasaremos a hablar del grande Felisberto Hernández, una de las  glorias de la literatura mundial, otro aporte del Uruguay a las letras universales (¡“Juana de América”, como bautizara a la Ibarbourou, tan bella y apropiadamente nada menos que Juan Zorrilla de San Martín, y sin olvidar a Juan Carlos Onetti y otros), entre quienes no tienen cabida las caras decentes de los escritores del totalitarismo, los BenedittiS o GaleanoS, perifoneadores de la anti condición humana, tan eficientes para ello como malos escritores.

Del tan querido y respetado Felisberto nos hablará su nieto, Sergio Elena, quien acaba de ser amorosamente importado, y no en comercio fronterizo, por una kuñá guapa compatriota, Jacqueline. Sergio también habrá de deleitarnos con la música de Felisberto, y la suya propia pues también es músico, compositor y virtuoso! Con Sergio hablaremos de su propia obra literaria y musical, y nos contará de los secretos de las buenas pastas caseras, que él aprendió para deleite de todos en los caminos tan anchos de este mundo cada vez más pequeño y a la vez más ajeno al ser humano, lo que también nosotros queremos ayudar a corregir.

Acompáñennos por “fb” y llámennos para conversar con ustedes desde donde estén. ¡¡¡Estaremos transmitiendo para el Paraguay y el mundo, uniéndonos todos en un inmenso abrazo de fraternidad, cantando a la vida y desde nuestros corazones sonrientes, pero sin envainar la Tizona del Cid, para enfrentar a cuanto totalitario ande por ahí, devastando a sus propios pueblos que es devastar a la humanidad!!!




JLSG
Asunción, a domingo 27 de enero de 2013
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Código del artículo: RSG21




Algunos pocos enlaces sobre Felisberto:
http://www.felisberto.org.uy/
http://www.ciudadseva.com/textos/cuentos/esp/hndz/fh.htm
http://es.wikipedia.org/wiki/%C3%A1ndez
http://cvc.cervantes.es/literatura/escritores/fhernandez/
http://www.elortiba.org/feliher.html
http://webs.demasiado.com/ltamargo/felisbertoh.html


jueves, 24 de enero de 2013

La seguridad y la defensa de la Patria y de la Humanidad exigen, y a la vez posibilitan, localmente, el funcionamiento pleno de las instituciones y el ejercicio de la ética de la democracia, los derechos fundamentales del ser humano, y aseguran la soberanía y la independencia de un país, respetando el derecho internacional y fortaleciendo la paz mundial, para lo cual la ciudadanía debe estar informada por medio de las libertades de pensamiento y expresión, lo que desde hoy, jueves 24, será una contribución más de de la alianza entre la web y blog “Defensa Nacional”, y este espacio de las redes (el de JLSG), por medio de una emisora “on line” (http://www.desdeparaguay.com/grc)


Escribe José Luis Simón G.
El Palacio de López, sede de la Presidencia de la República y cabeza del Poder Ejecutivo de la República, con la tricolor enseña en lo alto, flameando bajo el cielo de la Patria paraguaya, y abrazándose con la Humanidad, es la sede física del Poder Nacional, real y potencial, erigido desde la soberanía ciudadana, y a la cual debe brindar seguridad plena el Estado de derecho democrático (Edd), en construcción en nuestro país. Una de las graves deficiencias de la apertura política de 1989, con la ciudadanía e historia paraguayas, es la de la Seguridad y Defensa de la sociedad e instituciones del Edd, sin las cuales resulta imposible aspirar a la calidad de vida, con libertades y garantías fundamentales como la Justicia. En esta actividad le cabe una gran responsabilidad a los medios de comunicación, sobre todo observando la coyuntura regional del golpe palaciego totalitario “castro-bolivariano” en Venezuela, y las previas agresiones de ese origen padecidas por el Paraguay (Foto de Carlos Crichigno).


El programa de radio “on line” (http://www.desdeparaguay.com/grc), que informalmente se inaugura hoy jueves 24 de enero, en la emisora “Stereo GRC Musical. Veinticuatro horas de música para nuestra gente”, aquí y en el mundo, y para todos los pueblos del mundo, es el resultado de la alianza estratégica entre las web, página y “twitter” denominadas “Defensa Nacional”, de más de una década de antigüedad, las primera plataformas, y el   esfuerzo de menos de un año, del blog, páginas de “facebook” y cuenta en “twitter” de JLSG.

Esto demuestra que ya no es tan cierto aquello de que los paraguayos somos incapaces de ponernos de acuerdo, no para pedirle al país que se ocupe de nosotros, sino como quería aquél gran estadista que fuera el asesinado presidente norteamericano, para decirle a la propia Patria: “Es esto lo que modestamente ofrendamos a los compatriotas de las redes, en homenaje al sacrificio de tantos de nuestros mayores, hombres y mujeres”.

Y lo hacemos en una coyuntura histórica –aquí, y en América Latina y el Caribe, y en el mundo– amenazada por excesivos peligros para la democracia de ciudadanos y ciudadanas que aspiramos ayudar a construir. Es decir, hablamos de una democracia regida por la soberanía popular, no politiquera, y de avances sistemáticos hacia la calidad de vida, en todas sus dimensiones y con énfasis en la educación, la salud, la Justicia, las libertades y garantías y derechos, el trabajo y la preservación de la dignidad trascendente del ser humano. Este jamás debe ser apenas un medio para fines económicos o político-ideológicos. El ser humano, que no lo es sino solo en sociedad, nunca puede ser únicamente un medio.

El programa de fondo en esta radio en construcción correrá por cuenta de Carlos Crichigno, un compatriota pionero en conectividad, y, desde tiempo ha, volcado a los problemas de la seguridad y defensa de la nación, y de quien esto firma, que comparte esa preocupación, tal como ya la hemos definido días atrás.

Este programa central, todavía sin nombre, será para la gente, para que todos hablemos, nos expresemos, aprendamos a debatir civilizadamente, y para estimular la aparición de puntos básicos de coincidencia, en términos nacionales.

Lo nuestro no es ni será la política partidaria, proselitista, que hoy es tan solo politiquería, sino política nacional y de Estado, desde la sociedad, para que como nación e identidad nos fortalezcamos dentro de la Humanidad, y que cada quien después traslade esos valores a sus propios ámbitos de actividad, empezando por la política, que para nosotros es lo vinculado al poder, pero desde la perspectiva del servicio y bien público, y siempre respetando a la Constitución, los tratados, las leyes.

La seguridad y la defensa en el Edd
Recordemos lo que hemos explicado días atrás, desde estos mismos espacios: “La seguridad humana integral, individual y colectiva, que tiene uno de sus componentes en las políticas de Estado referidas a la Defensa Nacional (DN), no es un fin en sí mismo para el Estado de derecho democrático (Edd), entendiendo por tal el marco jurídico-político del sistema democrático representativo de gobierno, que exige la más amplia participación de la ciudadanía. Esto no en el sentido totalitario castro-comunista y ‘bolivariano’, el de la locura del denominado ‘socialismo siglo XXI’.

“El Edd, representativo, es a la vez uno de ciudadanía vigilante de sus propios representantes, quienes deben ser auténticos servidores públicos, constitucionalmente hablando, y, por encima de todo, es una sociedad política (¡jamás politiquera!) con hombres y mujeres cumplidores de sus obligaciones-deberes constitucionales, y exigentes, sin jamás claudicar de sus derechos, libertades y garantías.

“El Edd es característico de las sociedades abiertas, con economía de libre mercado, responsabilidad social y sostenibilidad, integrada bilateral, regional, continental y mundialmente con pueblos y Estados que comparten similares valores, ideales, principios y propósitos. Este Edd requiere de intereses e identidad nacionales definidos, y con aparatos estatal y gubernamental eficientes y adecuados a las necesidades del país.

“Únicamente en los regímenes dictatoriales, autoritarios o totalitarios la seguridad se autonomiza de los límites legales y legítimos que caracterizan al Edd, para convertirse en un fin supremo, en sí mismo, que no es otro que el mantenimiento de una opresiva estructura de dominación, a cualquier precio, como ocurre con los sistemas totalitarios, de izquierda (comunismo) o de derecha (nazi-fascismo). Y al que también pueden conducir los ‘totalitarismos de mercado’, que resultan del poder económico-financiero no sujeto a leyes legales, legítimas, justas y razonables (de cumplimiento posible), lo que nada tiene que ver con economías estatizadas o centralmente planificadas (totalitarismos comunista y nazi-fascista)”.

Nuestra filosofía periodística y para las redes
Para hacer realidad nuestros propósitos, desde el ámbito particular de las comunicaciones, la filosofía y valores que este medio “on line” se compromete a poner en práctica, siempre y en todos sus espacios, se manifestarán por medio de los siguientes principios puestos en práctica, coherentes todos con los ideales del Edd y de la sociedad abierta:

El periodismo y la comunicación en las redes constituyen una “función pública” (originada materialmente en iniciativas y/o empresas privadas, en términos organizativos, y jurídico-políticamente en el Edd), lo cual quiere decir que las responsabilidades de la emisora exceden los fines meramente económicos de cualquier empresa y el de las relaciones laborales que les son inherentes.
Es este emprendimiento uno de servicio público, por encima de todo y fundamentalmente, sin jamás perder de vista la legítima aspiración de autofinanciar empresarialmente esta iniciativa periodístico-comunicacional. Es que la naturaleza de tal tipo de servicio  no acaba ni empieza con la búsqueda de la rentabilidad económica, que siempre debe regirse por medios legales y la competencia honesta.

Quienes trabajaremos profesionalmente en esta emisora no realizaremos tan solo una actividad organizada y subordinado dentro de una unidad empresarial de este tipo, y tenemos la obligación de entender la naturaleza de nuestra enorme responsabilidad individual y social en la obtención, elaboración y difusión de la información y de las ideas.

Nuestra emisora sostiene que el compromiso central  de todas nuestras plataformas comunicacionales y periodísticas es con la sociedad en su conjunto, respetando siempre escrupulosamente los derechos, libertades y garantías de las personas.

La información, análisis, comentarios y opiniones (que vayan a ser obtenidos  dentro de los límites de la perfectibilidad humana) serán difundidos, sin analizar ventajas o desventajas, públicas o privadas, siempre con respeto hacia los valores fundamentales de la persona humana, y sin emplear la emisora como arma al servicio de intereses que no sean otros que los elevados ideales que se inspiran en estos principios y valores humanistas sustantivos.

Esta plataforma de las redes garantiza que siempre difundirá todo aquello que de relevancia pública haya de obtener, cuidando debidamente la comprobación de los hechos, acontecimientos y procesos propalados, siempre que resulte de evidente interés público y periodístico, y sin jamás haber infringido ninguna ley para la obtención de tales contenidos.

Los profesionales periodistas del medio se comportarán con integridad, buena fe y neutralidad (respecto de intereses particulares: propios o extraños) en la búsqueda de informaciones y en su propalación, inhibiéndose de retener, derivar u ocultar información, comentarios, análisis, opiniones, etc., en ninguna circunstancia.

Esta plataforma comunicacional de las redes, y quienes vayan a trabajar con nosotros, aceptan que las informaciones, valores e ideas no son mercancías de las que puedan apropiarse individualmente, sino que ellas constituyen propiedad de la sociedad en su conjunto, la que a través de lectores y anunciantes financia el proceso informativo y posibilita en los hechos la materialización de las libertades fundamentales de prensa y expresión.

Una reflexión última
Una iniciativa comunicacional como la que se ofrece aspira a convertirse en un instrumento de unidad nacional sin el menor componente chovinista y sin jamás desconocer la pluralidad de actores, intereses, ideales políticos, etc., siempre en la perspectiva del Edd y de la sociedad abierta, que para su permanencia en la historia requieren también de la educación ciudadana en las cuestiones fundamentales de la seguridad y defensa de la Patria paraguaya y de la Humanidad. Aquella y esta habrán de condenarnos sin posibilidad de apelación alguna, de no proceder tal como nos comprometemos públicamente a hacerlo.




JLSG

Asunción, a jueves 24 de enero de 2013
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Código del artículo: RGCC

martes, 22 de enero de 2013

Ni uno próximo, ni mentir un último encuentro


Narración de José Luis Simón G.
(Este ejercicio elemental de redacción se ofrece en amistad a una
muchacha-mujer, porque alguna vez dedicó un poema a un desolado
exiliado paraguayo, en tiempos de otro cólera, minúsculo en
comparación con el actual, el del “castro-bolivarianismo”).
Una majestuosa y serena puesta del sol, desde los malecones de la Costa Verde, Miraflores,  Lima, Peru, un día de mayo de 2011 (Fotografía bajada de Google: ©richardkohler.com y con el siguiente correo: www.richardkohler.com).



Uno
No puede creer que estén hablando, después de tanto tiempo de caminos que jamás volvieron a cruzarse. Y sí, es él, pero otro también. La misma voz pausada y plena, grave ya entonces, más ahora, que envuelve siempre, y con las palabras adecuadamente moduladas, para servirles de cabalgadura a lo que decía/dice, bien pronunciadas, sin la menor afectación, y con ese dejo tan suyo, propio, personal... A veces bajaba tanto el tono que tenía que esforzarse para escucharlo. En un pantallazo constata que la nieve del tiempo ya se hizo sentir en esa cabeza, ahora de pelos algo largos y en ordenado desorden, en ebullición permanente como la vez de la despedida, cuando él le entregó el departamento donde se refugiaría un tiempo con su pequeñuelo, concebido amorosamente cuando aún no vislumbraba el desengaño de su primer pareja. Observa que el rostro se le ha agrandado por la barba, ni corta ni desprolija. Le encanta verlo sólido en su madurez y sin las señales de quienes ya han sucumbido a ellos mismos. Desde luego, no es el jovenzuelo alto, delgado de pelo castaño y crespo que sobre los labios ensayaba el bigote que llegaría a ser un día. Décadas pasaron desde aquél primer encuentro en los jardines encantados y bien cuidados del campus de la universidad, en Fundo Pando, antes de eso un inmenso arenal sembrado de piedras de todos los tiempos, en la sequísima costa  que Lima casi desconoce. Ese oasis estallaba en colores durante las pocas semanas primaverales con días en que el cielo no estaba con ese sempiterno gris ceniciento, al que agravaba la tenue garua, esa que a Zavalita (el de “Conversación en La Catedral”) le hacía sentir sobre el rostro como molestas patitas de zancudos o algo así. Ella revive su mirada penetrante que siempre buceaba más allá de cada encuentro, a veces lidiando con fantasmas (era cuando se le oscurecía más que un poco el semblante, en ráfagas repentinas de duración variada), y que en ciertas ocasiones la envolvía por completo con los deseos contenidos de entonces. En tales ocasiones se le encendía el rostro con el rubor inocultable del ser deseada, que casi la incendiaba, fuego que ambos nunca llegaron a desatar. ¿Por qué? No lo supo ni lo sabe. ¡Tantas veces se lo preguntó cuando en algún recodo de su propio camino trataba de cicatrizar la última herida del alma!  ¿Lo sabía, sabrá él? ¿Se lo habría preguntado a veces?

Dos
El tampoco cree estar con la muchacha de límpidos y deslumbrantes ojos glaucoazulados, en los cuales, bastante tiempo atrás, los suyos sin obstáculo alguno se abrían paso, hasta esa otra alma anhelante: pero siempre se quedaron sin traspasar los límites, los de ella, los de él. Ahora, en el reencuentro siente que ya no es aquél joven, aunque sigue siéndolo todavía, en más de un aspecto. Es la continuación y cambio de las propias vidas de un solo hombre, quien en el presente se asoma a las transparencias nunca olvidadas, pero que son ya las de la plena mujer que es desde hace tiempo, y que también sigue siendo ella, la más hermosa joven entre tantas bellas del campus de Fundo Pando, la de los “jeans” y los jersey más ajustados de toda la universidad, que resaltaban sus formas naturalmente voluptuosas, propias de la estética de ese tiempo. ¿Quién se creía que era el tipo ese de otras tierras para acaparar la atención de la niña de los ojos de tantos galanes despechados, quienes no sabían que él, el extraño sujeto, tampoco conocía cuál era su estado sentimental en el corazón de ella ni el de ella en el suyo?

Tres
En fin, desde la primera vez hablaron de tantas cosas y recordaron a amistades tan queridas que el tiempo siempre se les hacía corto. Y empezaron a escribir su propia versión de en busca del tiempo perdido, pero como amigos cálidos, con sabor a ese caramelo suave y agridulce de quienes continúan decididos a sentir cada instante de la propia vida. Ella se siente instalada en su matrimonio y familia. Y él mantiene su decisión, y nada parece que vaya a cambiarla por lo menos en un tiempo corto, de no prometerse un próximo encuentro sentimental y mucho menos (la frase es de Borges o de Octavio Paz, más pareciera del primero) mentirse uno último.

Cuatro
Y se siguen encontrando como amigos muy cercanos que buscan el bálsamo de las afinidades ahora electivas. Entre otras razones porque, cuando ya dejaron de verse, a raíz de que él se marchara del Perú, décadas atrás, para escribir viviendo su propia vida, ella le dijo que en cierta ocasión le había dedicado un poema, después extraviado en alguna parte, en esos tiempos de inestabilidad que al final no era tanta como la del presente. Quedó muy emocionado, al enterarse de ello, que si para el equilibrio del universo el hecho careció de la menor importancia, para él en modo alguno era así.  Le prometió que lo narraría en uno de sus relatos, que los perpetra solo para él, y que no comparte con nadie, pero que cuando lo hiciera rompería su costumbre, por esta vez, en su homenaje y después de publicarlo en un espacio que generosamente otra amiga ha abierto, incluso para soportar esperpentos dudosamente literarios como los suyos, él se lo leería a ella. Quienes saben algo de esto comentan que las cuartillas han sido borroneadas ya y que ahora mismo los pone alguien en el sitio de Nila. Después de subidas a la red, solo faltará que ella lo escuche cuando él se lo lea.

Cinco
La moraleja, si se permite el arcaísmo en tiempos "posmodernos”, es que la vida nunca debe ser apenas el transcurso del tiempo. Por ejemplo lo evidencia el que la palabra del presente, que se proyecta hacia el mañana, nos convierte en contemporáneos del propio pasado, pero con la capacidad de volver a disfrutarlo en su esencia, y sin con ello suplantar o impedir lo que todavía debe ocurrir.



Nota:
Todo surgió cuando ya era casi medianoche, el resultado de un otro momento de reencuentro consigo mismo, de quien les impone acerca de todo esto, y que cuando se produce tiene este tipo de resultado, aunque por lo común nadie se entere de ello, excepto el perpetrador. Haciéndole caso a Nila López, y siempre sonrojado, hoy el escribidor estas líneas a la consideración de Uds., amigas y amigos.




JLSG
Asunción, a martes 22 de enero de 2013D
Código del artículo: NLM2

domingo, 20 de enero de 2013

La seguridad ciudadana, un componente en la seguridad y defensa nacional, solo puede ser eficiente si es constitucional, en el sentido de las sociedades abiertas, organizadas como Estado de derecho democrático y representativo, bajo fiscalización participativa de “Ñandé (nosotros: ‘we’) ‘the people’ (el pueblo)”, doctrinas a las que también debe sumarse la ciudadanía regional, pues nos amenaza un agresivo y expansionista rebrote totalitario “castro-bolivariano”


Escrito (también en representación y con autorización de Carlos Crichigno) por José Luis Simón G.
JLSG y Carlos Crichigno, ciudadanos de la Patria paraguaya y de la Humanidad, decidieron llevar adelante una alianza estratégica, a la que está invitada a adherirse la ciudadanía que comparte esta suerte de declaración de principios de la seguridad y defensa nacionales, que es el contenido de la presente entrega (Foto de José A. Valenzuela F.).



La seguridad humana integral, individual y colectiva, que tiene uno de sus componentes en las políticas de Estado referidas a la Defensa Nacional (DN), no es un fin en sí mismo para el Estado de derecho democrático (Edd), entendiendo por tal el marco jurídico-político del sistema democrático representativo de gobierno, que exige la más amplia participación de la ciudadanía. Esto no en el sentido totalitario castro-comunista y “bolivariano”, el de la locura del denominado “socialismo siglo XXI. 


El Edd, representativo, es a la vez uno de ciudadanía vigilante de sus representantes, quienes deben ser auténticos servidores públicos, constitucionalmente hablando, y, por encima de todo, es una sociedad política (¡jamás politiquera!) con hombres y mujeres cumplidores de sus obligaciones-deberes constitucionales, y exigentes sin jamás claudicar de sus derechos, libertades y garantías.

El Edd es característico de las sociedades abiertas, con economía de libre mercado, responsabilidad social y sostenibilidad, integrada bilateral, regional, continental y mundialmente con pueblos y Estados que comparten similares valores, ideales, principios y propósitos. Este Edd requiere de intereses e identidad nacionales definidos, y con aparatos estatal y gubernamental eficientes y adecuados a las necesidades del país.

Unicamente en los regímenes dictatoriales, autoritarios o totalitarios la seguridad se autonomiza de los límites legales y legítimos que caracterizan al Edd, para convertirse en un fin supremo, en sí mismo, que no es otro que el mantenimiento de una opresiva estructura de dominación, a cualquier precio, como ocurre con los sistemas totalitarios, de izquierda (comunismo) o de derecha (nazi-fascismo). Y al que pueden conducir los “totalitarismos de mercado”, que resultan del poder económico-financiero no sujeto a leyes legales, legítimas, justas y razonables (de cumplimiento posible), lo que nada tiene que ver con economías estatizadas o centralmente planificadas (totalitarismos comunista y nazi-fascista).

En las sociedades abiertas, jurídico y políticamente organizadas como Edd, la seguridad resulta del funcionamiento pleno y legal de las instituciones, del mayoritario respeto a la ley por parte de ciudadanos y autoridades, y de la respuesta que, en el marco de las leyes, dan los legítimos servidores públicos a los desafíos, tanto a los de origen interno como externo, que amenazan a la convivencia civilizada y a sus instituciones.

Esto último es el contenido central de la DN, que es amplia, abarcativa de todas las dimensiones de la realidad, y que al poder disuasivo militar de la defensa solo tiene como “ultima ratio”. Solo se la emplea (y para ello se debe estar preparado) cuando, por ejemplo, los agresores de la Patria paraguaya y de la Humanidad quieren imponernos sus intereses geopolíticos e ideologías totalitarias, como pretenden los “castro bolivarianos”, con sus subordinados “luguistas” aquí, ya sea comprando y sobornando a las “autoridades”, o paralizándolas por el miedo.

El ambiente o la situación de seguridad, empezando por la jurídica, que es característico del Edd, es el que le permite estar en las mejores condiciones para asumir su responsabilidad central, la de asegurar la convivencia civilizada, en el frente externo, y, llegado el caso, en el ámbito interno o local, sin por ello tener que sacrificar los valores de la sociedad abierta y las conquistas del Edd, para lo cual -entre otros prerrequisitos- deben funcionar las instituciones y liderazgos democráticos, y la más amplia participación ciudadana.


La historia demuestra que la seguridad y la defensa, entendidas como se plantea aquí, permiten el más pleno disfrute individual y social de las ventajas del Edd y de la sociedad abierta, y su proyección en el tiempo, todo lo cual requiere del instrumento de las Políticas Públicas de Defensa (Ppd), entre otras complementarias e interdependientes, para que la imprescindible Seguridad Ciudadana sea auténtica realidad. Y no como ocurre ahora, cuando la situación es caracterizada por la inseguridad generalizada que hoy padecemos, resultado de los ataques de los regímenes totalitarios del área y de los gobiernos “democráticos” que a ellos se subordinan; y de los desafíos del crimen organizado (corrupción sistémica, narcoactividad terrorismo y delincuencia criminal), todo alimentado por la indefensión jurídica que significa la impunidad y por la debilidad de la ciudadanía e instituciones.

De todo lo anterior se desprende que para nosotros la integración no es el adefesio totalitario del “Merc-Unasur”, y que enterrado por los “bolivarianos” el Tratado de Asunción (lo que debe ser denunciado ante la Corte Internacional de La Haya), debemos encaminarnos de inmediato hacia los acuerdos bilaterales de libre comercio y al audaz y promisorio diseño de la Alianza del Pacífico.

También se desprende que, para nosotros, es sinónimo de inseguridad la “socialista siglo XXI” Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR), neoimperialista y totalitaria, al igual que otros mecanismos de fachada comunista-chavista, como la Alianza Bolivariana Americana (ALBA) y la denominada Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC). También debemos reclamar nuestros derechos conculcados en la desfalleciente Comunidad Iberoamericana de Naciones (CIN), que se encuentra en estado comatoso desde Cádiz 2012.

En la OEA, a raíz de la brutal traición reciente del secretario general José Miguel Insulza, en la actual crisis creada por el castro-chavismo en Venezuela, debemos mantenernos en el marco de su Carta Democrática, y emplear la diplomacia bilateral, subregional, regional, continental y mundial como la primera línea de la seguridad y defensa nacionales, sin por un segundo dejar de lado la preparación para nuestra propia defensa, la que jamás debe ser puesta en otras manos que no sean las nuestras, y sin por ello desechar las alianzas que debemos promover desde los legítimos intereses de la Patria paraguaya y en el marco de los valores y principios de la Humanidad.

Es por eso que, a los com-Patriotas del Paraguay y de la región y del mundo, propios y de otras naciones, les invitamos a integrarse a la alianza estratégica, en defensa de la Patria paraguaya y de la Humanidad, que convinimos en realizar Carlos Crichigno (Defensa Nacional: desde sus páginas web y en “fb”) y José Luis Simón G. (blog y páginas en “fb”, también), y que muy pronto aportará también sus programas de radio “on line”, por medio de una emisora en internet  (http://www.desdeparaguay.com/grc) que ya está transmitiendo 24 hs. al día, por ahora solo música paraguaya.

¡Con el brazo, el respeto, la fraternidad y la amistad de siempre, soberanos y soberanas de la Patria paraguaya, defensora heroica y todavía solitaria de la Humanidad en la región!


JLSG y con la autorización de Carlos Crichigno

Asunción, a domingo 20 de enero de 2013
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Código del artículo: CCV3